Soy Lorena. Nací hace casi 39 años en Madrid. Desde hace 20 años gestiono mi propia empresa deportiva dedicada a la enseñanza de tenis y padel ofreciendo sus servicios a colegios. Siempre he sido muy deportista. Creo que he practicado casi todos los deportes habidos y por haber, pero el mundo de la raqueta siempre fue un amor en mayúsculas. Estuve varios años compaginando mis entrenamientos como jugadora, estudios y las clases que me iban ofreciendo para imparir a niños en el club donde entrenaba. Después de acabar mis estudios y dejar la competición, decidí embarcarme en el apasionante y laborioso mundo de la “mujer emprendedora”. Así nació Quality Racket, aun vigente aportando nuestro granito de arena en la formacion deportiva y humana de nuestros alumnos.

MI HISTORIA CON LA MADERA

Desde siempre he sido una persona autodidacta y muy inquieta en todos los ámitos. Mi abuela decía que no paraba quieta, dejaba el balón y cogía la bici para después seguir con los patines y asi toda mi infancia, adolescencia y aún hoy siendo ya una mujer adulta.

Mi historia con la madera viene de hace unos años, empecé haciendo las típicas casitas para pájaros, algunos muebles para casa, encargos familiares…y no se me daba mal y gustaba.

EL PRIMER PALO DE MI VIDA, ¡¡Y QUÉ PALO!!

Luego fuí haciendo cositas para mi casa, algún familiar, amigos…y llegó el día en el que la vida me iba a pegar el primer palo gordo, de esos que te dejan ko y aunque aprendes a seguir, nunca caminas igual. Falleció mi abuela Luisa, que era una madre para mí. Teníamos una relación y un vínculo muy especial y aquello me dejó tiritanto.

La vida seguía, de diferente manera, pero seguía, debía seguir por ella. Y decidí crear una cuenta de Instagram en honor a ella e ir subiendo las diferentes cosas que iba haciendo. Si estaban en mi teléfono ¿por qué no compartirlas con más gente?. Y así nació Mundo Virutas, que en sus comienzos se llamaba MI LULU (apodo cariñoso que algunas personas le decían a mi abuela). Con el paso del tiempo y viendo que a la gente le gustaba las cosas que iba haciendo, decidí darle un nombre que al leerlo supieras que la temática estaba relacionada con la madera, y Mundo Virutas creo que es el nombre que le va al pelo.

Y de aquello a lo de hoy, ha habido por medio una pandemia sanitaria mundial que aun padecemos, el apoyo incondicional de un marido paciente y generoso, y la inspiración que me aportan mis otros dos compañeros de viaje, Cora y Choco, dos perros de agua que son los que, sin ellos saberlo, me ayudan a crear cosas bonitas para las mascotas.

¡¡De forma muy resumida, esta soy yo!!